La belleza del universo a veces deja de lado las sutilezas, y se nos muestra de lleno. Un eclipse, creo yo, es una de esas veces. No hace falta más que paciencia y un poco, sólo un poco de sensibilidad, para maravillarse.
La foto, acaso sólo anecdótica, fue tomada desde mi balcón durante el eclipse total de luna, minutos antes de las 5am, del 21/12/2010.